El drama de Edinson, quien tiene que repetir el año y no tiene computador ni internet para hacerlo
El pequeño que perdió el año por la falta de herramientas tecnológicas para hacer sus tareas, hoy vende cuadros hechos con cáscaras de huevos y témperas para adquirir un computador que le permita superar el sexto grado.
«Perdí el año porque no tenía internet, tenía que ir donde los vecinos a pedirles internet para poder hacer las tareas», señala Edinson Rojano, el pequeño ve truncado su derecho a la educación por la falta de acceso a equipos de cómputo.
El pequeño recorre las calles de su barrio en busca de que le presten un celular con el que pueda tomar sus clases, sin embargo, este esfuerzo no es suficiente, ya que el poco tiempo que le brindan no le alcanza para cumplir con todas sus obligaciones.
Edinson ve en la educación el camino para transformar la vida de su familia que vive en una casa hecha de polisombra verde y en la que el acueducto casi no llega, por eso, se trasnocha haciendo cuadros con cáscaras de huevo y témperas, con la esperanza de venderlas para reunir el dinero suficiente para comprar un computador.
Con el dinero reunido de los pocas piezas que ha logrado vender, Edinson ha podido aportar para la comida de su casa y ha adquirido los materiales para seguir con su emprendimiento.
«Hago la figura en un cuaderno, lo saco aquí en el vidrio con cáscara de huevo y témperas», explica.
El jóven apela al buen corazón de los colombianos para que lo apoyen en su idea de negocio, con el que espera terminar sus estudios, conseguir una beca, mejorar la situación de su familia y comprarle una casa propia a su mamá.
Por: Stiven Pérez
Comunicador Social – Periodista
